Como vimos en las primeras entradas de este blog,
los menores se encuentran con muchos derechos y pocos deberes ante la ley y muchas
veces están sobreprotegidos.
Hace meses, veíamos en los medios de comunicación
cómo un padre había sido denunciado por su hija de 16 años afirmando que éste
la había secuestrado. Se siguió entonces el protocolo de actuación ante una
posible desprotección de la menor, dejando al padre en libertad con cargos y
acogiendo a la menor en un centro.
Al poco tiempo, la menor se escapo saliendo a la luz
los supuestos motivos por los que el padre la había castigado y comprobándose
que no existía ninguna desprotección hacia la menor, la cual volvió a su casa.
Otro famoso caso, fue el de una madre sordomuda condenada
en un principio a 45 días de cárcel y
con un aumento de 67, tras abofetear a su hijo de 10 años y agarrarlo del cuello por no haber hecho los
deberes, después de que éste le tirara una zapatilla y se encerrara en el baño.
La sentencia recogía que el niño presentaba un carácter difícil y desobediente.
Con estos casos y otros muchos, quiero demostrar que
los padres son los que se encuentran desprotegidos ante las instituciones ya
que nadie les apoya, dicen seguir un protocolo de actuación, sin ni siquiera
constatar que la situación denunciada ha sucedido como los menores afirman
realmente, imponiendo unas sentencias exageradas y siendo en muchos de los
casos, como la primera menor, las denuncias falsas.
Enlaces de las noticias:
Ana Bellido Fernández
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